DeadHappy, seguros de vida para atraer a la generación millennial

Hace un tiempo, IBM publicaba un artículo titulado Why aren’t millennials buying life insurance? en el que se analizaban las barreras que obstaculizaban que los millennials se interesasen por los seguros de vida. Se explicaba que:

  • Tienen una peor situación financiera que las generaciones anteriores: Son varios los estudios que apuntan hacia esta dirección, como el informe publicado por el Pew Research Center, que subrayaba que tienen menos ingresos y riqueza acumulada que las generaciones anteriores a la misma edad.
  • Se muestran confundidos sobre los detalles de la póliza y tienen dudas sobre la necesidad de tener un seguro de vida, siendo este último el mayor impedimento para suscribir este tipo de productos.
  • La gestión burocrática y los trámites son una barrera de contratación, por el tiempo y el esfuerzo que supone.

El mayor obstáculo con la población objetivo sigue siendo una combinación de interés, comprensión y complejidad percibida.

Why aren’t Millennials buying life insurance?

En este sentido, el informe The Millennial Life Insurance Gap también analiza las razones por las que los millennials no tienen un seguro de vida, que van desde la baja prioridad que le dan a este producto respecto a otros gastos, no querer incurrir en costes adicionales o incluso la desconfianza en las compañías de seguros:

Extraído del informe ‘The Millennial Life Insurance Gap

Además, este último estudio recoge los resultados de una encuesta llevada a cabo por la empresa editora del informe -Legal & General- en la que se llevó a cabo un sondeo a más de 2.000 millennials en Reino Unido. Se plantean las siguientes conclusiones:

  • Tener una vivienda con hipoteca es el factor que mejor predice la contratación de un seguro de vida: Una pareja casada de entre 30 a 35 años, con al menos un hijo, tiene 2,4 veces más probabilidades de tener un seguro de vida si tienen una hipoteca que si viven de alquiler. Otro dato interesante en este sentido: Según la encuesta, un 36% de los millennials con hipotecas conjuntas y sin seguro de vida afirma que, en el caso de su muerte, su pareja no podría afrontar el pago de la hipoteca.
  • La razón por la que muchos millennials no tienen seguro de vida es una cuestión de prioridades: Los millennials se plantean la posibilidad de una muerte prematura en la misma medida que la generación X y los baby boomers. Según la encuesta, el principal motivo por el que no contratan un seguro de vida es porque consideran que otros gastos tienen prioridad, como el pago de facturas o incluso, sus vacaciones. De hecho, 1 de cada 5 cotitulares de hipoteca sin seguro de vida afirmó que tener Netflix era, en su opinión, más importante que suscribir una póliza de este tipo.
  • Aunque el coste de la póliza es una barrera de entrada, 9 de cada 10 sobrestimó el precio de contratar un seguro de vida.
  • Es complicado conocer el funcionamiento de un seguro de vida si no se tiene uno: El 44% de los millennials sin seguro de vida afirmaron que no sabían que podría vincularse a la hipoteca para cubrir los costes asociados en caso de fallecimiento.
  • Un porcentaje considerable de las personas encuestadas con seguro de vida no conocían algunas de sus características: El 21% de los millennials con cobertura de vida confesaron que, en caso de que fallecieran, no sabían cuánto recibirían sus seres queridos.
  • Los resultados de la encuesta apuntan a que el coste de la póliza es prioritario, pero también es importante la claridad con la que se exponen los términos y las descripciones de los productos, prefiriendo aquellos que no tratan de endulzar el tema de la muerte: La mitad de los sondeados subrayan que el marketing honesto de una compañía les haría preferirla respecto al resto.

Tener una vivienda con hipoteca es el factor que mejor predice la contratación de un seguro de vida.

The Millennial Life Insurance Gap

DeadHappy, una compañía de seguros de vida diseñada para atraer al usuario millennial

Son muchas las compañías de seguros que están intentando innovar en su propuesta de valor para atraer a los millennials. No en vano, en 2025, representarán el 75% de la fuerza laboral, según un estudio de Pew Research. En este sentido, la start-up británica de seguros de vida DeadHappy, que cuenta con aproximadamente 16.000 clientes, ha apostado fuertemente por la digitalización con el fin de que suscribir una póliza de un seguro de vida sea un trámite rápido, sencillo y barato, dejando claro en qué ámbitos concretos le facilitan la contratación al usuario. Es más; arremete contra los trámites innecesarios con un estilo de copy muy directo: ‘Life insurance without the bulls#!t‘.

DeadHappy, la compañía de seguros de vida que pretende atraer a los millennials.
Imagen extraída de la web de Deadhappy.com

Su CEO, Phil Zeidler, explica que una de sus claves es intentar que el objetivo de la cobertura del seguro de vida sea más concreto para el cliente, en lugar de obligarles a asignar un valor en dólares abstracto a sus vidas. Cambian la pregunta de «¿cuánto dinero quieres asegurar?» por «¿qué quieres que suceda cuando te mueras?». Así surgen los deathwishes, que permiten la personalización ya que el usuario puede decidir cubrir los gastos del sepelio o pagar parte de la educación de un miembro de la familia. De hecho, puede incluso planificar su propio funeral, incluyendo detalles como la música, las flores o incluso planear una ceremonia funeraria vikinga. Y Zeidler incide en que DeadHappy ayuda a reducir la carga financiera y emocional que en ocasiones sienten los familiares después de la muerte de su ser querido.

DeadHappy ofrece al usuario la posibilidad de planificar su propio funeral.
Imagen extraída de la web de Deadhappy.com

Los millennials y su cambio de perspectiva respecto a la muerte

Son varios los estudios que reflejan, desde hace algunos años, que los millennials tienen una perspectiva más abierta hacia la muerte, desafiando el estereotipo de negación y evitación que le han atribuido a los jóvenes. La investigación Can millennials talk about death? Young adults’ perceptions of end-of-life care llevó a cabo un sondeo a 188 jóvenes y según explican «el hallazgo más sorprendente fue que los millennials, en general, estaban dispuestos a hablar sobre la muerte». Y subrayaban que el 54% de los encuestados ya habían tenido alguna conversación sobre el final de la vida con algún miembro de su familia. De hecho, la investigación concluye subrayando que los millennials podrían ser la generación con más capacidad de cambiar la forma en que el mundo en general piensa sobre la muerte y la atención al final de la vida.

Los millennials serán la generación con más capacidad de cambiar la forma en que el mundo en general piensa sobre la muerte y la atención al final de la vida.

Can millennials talk about death? Young adults’ perceptions of end-of-life care

Por supuesto que el estudio cuenta con algunas limitaciones, como que todos los participantes eran estudiantes universitarios de una gran ciudad, por lo que podrían no representar correctamente a toda la generación millennial. También es importante añadir que segmentar por generaciones se basa en asumir que los individuos que conforman cada grupo presentan características y necesidades parecidas que determinan sus patrones de comportamiento. Sea como sea, este tipo de estudios proporcionan información sobre tendencias que podrían tener su impacto en el mercado. Una de ellas, que queda patente en la propuesta de valor de DeadHappy, es el movimiento de la Muerte Positiva. Se trata de un enfoque en el que las personas abordan la muerte de una forma más abierta, lejos de evitar el tema o verlo como un tabú. Esta tendencia pretende ayudar a los individuos a prepararse para el final de la vida de una manera consciente y planificada. Esto implica discutir sus deseos y preferencias sobre su muerte, a la par que planifica sus necesidades emocionales, legales y financieras.

El movimiento de la Muerte Positiva empezó a ganar adeptos con el tuit de Caitlin Doughty, directora funeraria y co-fundadora de The Order of the God Death. Desde entonces han surgido death cafés en los que varias personas hablan sobre el final de la vida de forma abierta; aplicaciones como WeCroak, que envía 5 recordatorios diarios con el fin de que los individuos paren su frenética actividad y reflexionen sobre la muerte, e incluso death doulas cuya misión es acompañar a las personas en sus últimos momentos. Sin olvidarnos del canal de youtube Ask a Mortician, creado por la propia Doughty y que acumula casi 2 millones de suscriptores.

Probablemente DeadHappy haya diseñado su propuesta de valor basándose en el movimiento de la Muerte Positiva con el fin de llamar la atención de un público más joven, como la generación millennial. La investigación para conocer más sobre el comportamiento, necesidades y deseos del usuario les habrá permitido adaptar su oferta y crear soluciones, como los deathwishes, que se ajustan a las preferencias de esta generación con el fin de aumentar la satisfacción y lealtad de sus clientes.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *